La ciudad de Aparecida es conocida en todo Brasil por ser la sede de la basílica en honor a Nuestra Señora de la Concepción Aparecida, patrona del país y cuya fiesta se celebra cada 12 de octubre, ocasión en la que miles de fieles llegan al lugar para rezar y pagar sus promesas. Se trata de un lindo sitio para visitar a poco más de 2 horas de la capital paulista.

Conocida de manera informal como Aparecida del Norte, la ciudad se encuentra a 168 km de São Paulo, y su acceso se lleva a cabo por la Vía Dutra, la carretera que conecta esa capital con Río de Janeiro. Muy cerca de allí también tiene inicio la carretera Paratí-Cunha, que conduce hacia Paratí, ya en el estado de Río de Janeiro, y la cual posee un desvío para llegar a Ubatuba, en el litoral paulista.

El motivo por el cual la ciudad se hizo famosa nos remite a 1717, cuando tres pescadores encontraron una imagen de la Virgen, a la cual luego se le atribuyeron varios milagros. Con la popularidad de la imagen, en 1745 se inauguró la Matriz Basílica de Nuestra Señora Aparecida, conocida actualmente como Basílica Vieja y que posee dos torres y está construida en estilo barroco.

Con la enorme cantidad de peregrinos que llegaban cada año al templo, fue necesaria la construcción de una nueva basílica.  Fue así que en 1955 se inició la edificación de la Basílica de Nuestra Señora Aparecida, también conocida como Santuario Nacional de Nuestra Señora de la Concepción Aparecida, la segunda mayor iglesia católica del mundo, solo por detrás de la Basílica de San Pedro, en el Vaticano.

Inaugurada y consagrada por el papa Juan Pablo II en 1980, la imponente basílica tiene una torre de 100 metros de altura con mirador y una cúpula central de 70 metros de alto y 78 metros de diámetro.  En forma de cruz, con cuatro naves y estilo neorromántico, el templo puede albergar hasta 70.000 personas, recibiendo cada año más de 10 millones de peregrinos en su interior.

La Pasarela de la Fe, en formato de ‘s’ (de santa) y que conecta la antigua basílica a la nueva, es una impresionante estructura de casi 400 metros de extensión y 35 metros de elevación en su punto más alto. Por allí muchos fieles pagan sus promesas de rodillas, en un recorrido que conduce al mayor templo en veneración de la Virgen María en el mundo.

Otros sitios interesantes en Aparecida son la Iglesia de San Benito, adornada por figuras de ángeles, y el Reloj de las Flores del Valle del Paraíba (como es conocida esa región del estado de São Paulo), donde están plantadas más de 4 mil mudas de todo el país y que posee dos paneles que cuentan la historia de la ciudad.

El Puerto Itaguazú, en la curva del Río Paraíba del Sur, es el lugar donde se vio por primera vez la imagen de la Virgen y por ese motivo se convirtió en otro punto turístico de Aparecida. Allí se encuentran una capilla y el monumento Los Tres Pescadores; el turista puede llegar a ese lugar a través de balsa, por el río, o también en carruaje. Una linda opción de paseo por esta encantadora ciudad, centro mayor de la fe católica en Brasil.

Fotos: Basílica de Nuestra Señora Aparecida, por José Mauro O. Jr. y Rodrigo Soldon, las dos últimas (todas en Flickr)


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