Fundada en 1960 para ser la capital de Brasil, la ciudad de Brasilia es sin duda alguna una de las urbes de arquitectura y diseño vial más audaces del mundo. Con un sinfín de obras, monumentos y construcciones de gran atractivo, muchas de ellas proyectadas por el renombrado Oscar Niemeyer, este sitio tiene la capacidad de impresionar a los turistas más exigentes, quienes invariablemente se asombran con su modernidad y belleza.
Considerada Patrimonio Cultural de la Humanidad por la Unesco, Brasilia recibe anualmente 1 millón de visitantes, quienes tienen un variado menú de lugares para conocer. Uno de ellos es la Catedral Metropolitana de Nuestra Señora Aparecida, que impacta por su arrojado diseño, en forma circular, con 70 metros de diámetro. Otra iglesia de notable belleza es el Santuario Don Bosco, cuyo interior fascina por su riqueza y majestuosidad.
Brasilia fue construida y fundada durante el gobierno de Juscelino Kubitschek, que tiene en su honor un museo (el Memorial JK) y un puente de más de 1 km que lleva su nombre y que cuyo proyecto ha sido premiado internacionalmente por su espectacularidad. A su vez, el Panteón de la Patria y de la Libertad Tancredo Neves, de estilo modernista, homenajea a varios personas que contribuyeron a la nación.
Siendo sede del Gobierno brasileño, algunos de los atractivos de Brasilia giran alrededor de esa condición. La Plaza de los Tres Poderes, un gran espacio abierto adornado con preciosas esculturas y paneles, alberga edificios de mucha importancia, como el ya mencionado panteón; y también el Congreso Nacional, de líneas muy singulares, y el Palacio del Planalto, de trazos suaves y sede del Ejecutivo, donde además se conservan muchos libros y obras de arte.
La oferta de parques de Brasilia también es grande e incluye, por ejemplo, el Jardín Botánico, que cuenta con mirador, bosques, museo y un jardín en movimiento, entre otras instalaciones. Asimismo, el Parque Nacional de Brasilia se destaca por sus piscinas formadas por pozos de agua y sus sendas para caminata, mientras que el Parque de la Ciudad de Brasilia Sarah Kubitschek dispone de hermosas lagunas artificiales, parque de diversiones y áreas para deportes en más de 4 millones de metros cuadrados, lo que lo convierte en el mayor parque urbano del mundo.
El esparcimiento tiene su lugar ideal en el Lago Paranoá, que pese a ser artificial es de una belleza singular. Posee varias islas y playas, que además sirven de hábitat de numerosas especies de la fauna y la flora; paseos de barco y prácticas deportivas como el buceo, el esquí acuático, el remo y la navegación en canoa o en yate también son populares. Otra manera de contemplar una linda vista es subirse a la Torre de TV, cuyo mirador está ubicado a 75 m de altura y permite ver el deslumbrante horizonte de la capital brasileña.
Fotos: Congreso Nacional, por Iuri Kothe; Catedral Metropolitana, por Jorge Andrade; Lago Paranoá, por Flavia Rubenia (todas en Flickr)