Después de lo ocurrido en el terremoto de Japón y la fuga de la planta nuclear de Fukusima es muy fácil cuestionar el futuro de la pesca en Japón. Es evidente la preocupacion de los pescadores y pobladores locales por una inevitable caida en cuanto a las relaciones comerciales y a la confianza del consumidor despues de ocurridos estos hechos.
Si bien en muchos lugares continúan funcionando como el mercado Tsukiji en Tokio el cual es el mas grande del mundo, esta se ha visto afectada debido a que sencillamente «no hay clientes». La preocupacion mas inmediata es que en muchos pueblos del norte en donde hay gran cantidad de barcos, muelles, embarcaderos y pescadores simplemente no hay nadie debido a que «todo el mundo se ha ido».
Corea del Sur, Tailandia, Malasia, India, Singapur y Filipinas han anunciado exámenes mas intensos para productos de mar de Japón. Muchos restaurantes de Asia han dejado de comprar sus productos «hasta que la situacion se estabilice en el pais, parece poco probable que los huespedes se sientan comodos con los productos japoneses que consumen» dijo el gerente del hotel Mandarin de Hong-Kong Oriental Internacional.
Lejos de Japón, en Mumbai la precaucion es aun mayor: «No sabemos que peces estan contaminados y cuales no, por lo que nuestra medida de precaucion es la prohibicion de todos los peces procedentes de la zona» declaro un experto nuclear local.
En otros países como EEUU y Latinoamerica las precauciones son menos relevantes debido a la gran distancia, si bien las noticias muchas veces solo se dedican a promover el miedo contra todo lo que venga de Japón como vimos en el articulo terremoto en Japón y su influencia en el turismo agravando mas la situación y el daño a la población afectada, lo mas probable es que su restaurante favorito de Suchi siempre haya utilizado pescado de China, Chile o Tailandia que del mismo Japón, sin embargo el impacto en la industria turística y de alimentos podría durar varios meses, todo dependerá que medidas adopten las autoridades japonesas para poder «relanzar» su imagen en cuanto a seguridad turística y salud de sus productos alimenticios.
La lección que podemos llevarnos de todo esto es que la naturaleza es mas frágil de lo que imaginamos y que cualquier problema puede afectar a toda la población mundial, el futuro del turismo en Japón esta en la cuerda floja y podra tomar diferentes rumbos según las acciones que se tomen las autoridades japonesas en el presente. Para ver el articulo completo pueden ingresar a GADLING.