A tan solo 73 km de la monumental São Paulo, Santos es el balneario por excelencia de los capitalinos, que acuden a este sitio en busca de sus playas e islas para pasar las vacaciones, feriados y fines de semana. Dotada de una gran infraestructura, la ciudad es la más poblada y visitada de todo el litoral paulista.
Debido a la proximidad con la capital paulista, no son pocos los extranjeros que llegan hasta esta ciudad de Brasil, de hecho es la que recibe más turistas del exterior en la costa del estado. Con vistas a atraer cada vez más visitantes, desde los años 90 Santos, que se sitúa parcialmente en la Isla de San Vicente, ha pasado por un gran proceso de revitalización, en especial de su centro histórico, y también con la construcción de ciclovías, la plantación de árboles y la implementación de un tranvía turístico.
En efecto, el mayor jardín frontal de playa en extensión, con más de 5 km de largo, queda en esta ciudad: se trata de los maravillosos Jardines de la Orla de Santos, cuyo récord está registrado desde hace 10 años en el Guinness Book. En total, son más de 1.700 árboles, de los cuales aproximadamente la mitad es de palmeras de pequeña y mediana altura. Con 218.800 m² de área y 77 diferentes especies de flores, es sin duda uno de los proyectos más bellos del litoral de Brasil.
Santos tiene también el mayor puerto de Brasil y el de mayor movimiento en América Latina. El Puerto de Santos es un gran complejo de enorme importancia histórica y económica para la ciudad y el país. Uno de los principales productos exportados, desde siempre, ha sido el café; y es justamente el edificio del Museo del Café Brasilero, antigua Bolsa del Café, una de las más lindas construcciones santistas, con casi un siglo de historia e inspirado en el renacimiento italiano.
Otro punto de referencia de Santos es el Acuario Municipal, que con sus 30 tanques de agua y más de 200 especies de animales atrae a 800 mil visitantes por año. A su vez, el Monte Serrat posee un tranvía que se constituye en un bonito paseo para el turista, que en caso de ser amante del buceo tiene también una excelente opción: la Laja de Santos, una pared rocosa de 10 a 22 m de profundidad, que alberga una gran biodiversidad, incluyendo tortugas y pulpos.
Pero son las playas de Santos las responsables por el gran número de personas que llegan cada día en busca de esparcimiento y mucho sol. En casi 8 km de costa, la ciudad presenta seis playas, entre las cuales sobresalen: José Menino, de intensa vida nocturna y con una elevación (Morro de José Menino) buscada por practicantes de ala delta; el Gonzaga, probablemente la de mayor afluencia de gente; y el Boqueirão, otro conocido punto de encuentro de bañistas.
Además de las playas mencionadas, también están Embaré, que recibe a practicantes del surf debido a sus olas, Aparecida, que cuenta con buenas opciones de esparcimiento e intenso comercio, y Ponta da Praia (Punta de la Playa), donde se encuentra el Acuario Municipal y que es lugar de partida para ir hacia la Laja de Santos o a la ciudad de Guarujá, ubicada en una isla a la cual se llega en ferry. Otros sitios que pueden ser visitados son la Isla Urubuqueçaba, la Isla Barnabé y la Isla Diana, todas con diferentes atractivos que enriquecen aun más a esta preciosa región brasileña.
Fotos: Santos, por Luc Móvel (1 y 3) y Evandro Sudré (2) (todas en Flickr)