Isla de la Plata es un lindo e interesante destino ubicado en el Océano Pacífico, frente a la costa de la provincia de Manabí, en Ecuador. Su enorme tranquilidad y rica biodiversidad la convierten en un lugar fantástico para los amantes de la naturaleza, que también se encuentran con sendas ecológicas, playas y arrecifes de coral en los alrededores.
De acuerdo con la leyenda, era en esta isla que el explorador británico Francis Drake ocultó los tesoros que robó a los españoles en el siglo XVI. Gracias a ello la isla fue bautizada de esa forma, aunque hoy es mucho más conocida por su extraordinaria riqueza natural, especialmente en lo que dice respecto a su variada fauna.
Para llegar a Isla de la Plata, la mejor opción es tomar los barcos que salen de Puerto López, en un recorrido de 40 km y más o menos 1 hora de duración. Hay varias operadoras de turismo que ofrecen tours a la isla, los cuales suelen costar de 35 a 40 dólares y normalmente incluyen transporte de ida y vuelta, almuerzo y posibilidad de bucear en la superficie. El trayecto puede ser mayor a mediados de año, debido a la observación de las ballenas jorobadas de la Antartica.
La diversidad de la fauna de Isla de la Plata es tan grande que muchas de las especies de la célebre Galápagos se encuentran en este lugar. Entre los ejemplares más interesantes, se puede destacar el alcatraz (patiazul, patirrojo y de Nazca), el león marino, el lobo marino y el delfín. Asimismo, este es un sitio donde diversas aves migratorias llegan para reproducirse, proporcionando un bello espectáculo.
Este bonito lugar se encuentra dentro del Parque Nacional Machalilla, que cuenta con fantásticos acantilados y playas arenosas, además de dos senderos turísticos que se internan en la isla. Como esta tiene su costa rodeada por arrecifes coralinos, una maravillosa opción para los turistas es animarse a la fascinante experienecia del buceo de superficie o del snorkeling.
Fotos: Isla de la Plata, por Jonathan Hood (ambas en Flickr)
